miércoles, 3 de marzo de 2010

Tercera edad

Hace unos meses, en Navidad (uff! qué lejana queda!), fui a Navalcarnero, un pueblo de Madrid, a comer y a pasar el día. Dando un paseo por allí me encontré con esta escultura que me encantó. La foto ha estado esperando el momento adecuado para aparecer en el blog, y hoy ha sido el día. ¿Por qué? No lo sé, pero hoy he sentido el deseo de publicarla.

No puedo negar que me produce cierto desasosiego; más bien tristeza. El hastío en su postura, la mirada hacia el suelo, como si ya no les estuviese permitido tener aspiraciones y mirar hacia arriba o simplemente hacia adelante... Es la derrota y tal vez sea eso lo que más me entristezca de todo.

¿Por qué negarse a seguir viviendo? ¿Por qué no gastar las últimas fuerzas en aquellos deseos aún no alcanzados? Mientras haya vida, siempre hay tiempo de cumplirlos.

10 comentarios:

  1. Es verdad.. es bonita pero a la vez triste...

    Un besote!

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  2. Cierto, están como derrotados... Bonita pero triste, si.

    Saludos!!!

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  3. Parecen cansados, han vivido muchas historias.
    Yo quiero llegar a viejita y vivir cerca de las personas que quiero.
    Un abrazo y gracias por tus amables comentarios. Buenos dias :)

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  4. Hola Zamarat:
    Esa escultura, me hace pensar en positivo; porque vivir es la única manera de envejecer.
    "La vida solo se comprende cuando se mira hacia atrás.Pero solo puede ser vivida mirando hacia adelante".
    Lo que si debemos tener presente es que la tristeza del pasado no estope la alegría del presente.
    Besos!!!

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  7. Tremenda escultura. real y conmovedora.

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  8. Me gusta mucho lo que escribes en tu blog. La escultura, triste, sí, pero refleja la realidad de la vejez. Al final llegan así de cansados...no es siempre sinónimo de infelicidad. Es que el silencio, la tranquilidad... forma parte de lo que les hace sentirse bien.
    Besicos.

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  9. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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