"Y, sin embargo, era él quien había permitido que, en su relato, la pobre Silvia se lanzara contra el espejo. Podría haberlo evitado, pero es caso es que no lo había hecho [...] Al fin y al cabo, era él quien manejaba los hilos de sus personajes"
Creo que hacía tiempo que no disfrutaba tanto con una lectura juvenil y que no me encontraba con algo de tanta calidad. ¡Qué gusto da, encontrarse con libros así!
Ya el principio, con la magnífica presentación de su protagonista, Bambert, es sencillamente genial. Bambert es un hombre especial, de esos que perduran en la memoria: un individuo solitario que únicamente mantiene contacto con su inquilino, que tiene una tienda bajo su casa. Su gran pasión es escribir cuentos pero, cuando está a punto de empezar el último, decide concederles la libertad y los va soltando, uno a uno, atados a un farolillo chino. Junto a ellos añade una nota pidiendo que quien lo encuentre se lo reenvíe, para así conceder a cada uno un lugar de origen.
Ese es el marco narrativo de unos cuentos que se irán entremezclando con la realidad, de forma que ambas lleguen a confundirse.
Como decía al empezar, ha sido una agradable sorpresa y un gran descubrimiento que no puedo, ni debo, dejar de recomendar.
-----------------------Ya el principio, con la magnífica presentación de su protagonista, Bambert, es sencillamente genial. Bambert es un hombre especial, de esos que perduran en la memoria: un individuo solitario que únicamente mantiene contacto con su inquilino, que tiene una tienda bajo su casa. Su gran pasión es escribir cuentos pero, cuando está a punto de empezar el último, decide concederles la libertad y los va soltando, uno a uno, atados a un farolillo chino. Junto a ellos añade una nota pidiendo que quien lo encuentre se lo reenvíe, para así conceder a cada uno un lugar de origen.
Ese es el marco narrativo de unos cuentos que se irán entremezclando con la realidad, de forma que ambas lleguen a confundirse.
Como decía al empezar, ha sido una agradable sorpresa y un gran descubrimiento que no puedo, ni debo, dejar de recomendar.
Reto Sumando 2014: 36 caracteres (657/2014)
Muy bueno el blog.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias por tus palabras.
EliminarLos relatos me suelen gustar mucho, no se yo si el toque juvenil me gustaría tanto. De momento, me fio de tu criterio y lo anoto como posible. Un beso!
ResponderEliminarNo te dejes llevar por la etiqueta de literatura juvenil... Creo que en este caso gusta más a los adultos que a los jóvenes.
EliminarAbrazo!
No me suelen atraer demasiado este tipo de libros de relatos o cuentos así que a pesar de la opinión positiva, lo dejaré pasar
ResponderEliminarBesos
Si no te suelen gustar, haces bien. ¡Será por libros!
EliminarAbrazo!
Te deseo que tu hijo te salga el lector que sueñas, cosa que le llegará por ósmosis.
ResponderEliminarDos besos.
¡Ojalá, Francisco, ojalá!
EliminarAbrazo!
Original y curioso me parece este conjunto de historias de ida y vuelta...
ResponderEliminarBesos,
Desde luego, es muy original. Seguro que te gusta.
EliminarAbrazo!
Llevo una temporada bloqueada y me cuesta muchísimo leer. Espero se me pase pronto, pues pobre de mi si no es asi.
ResponderEliminarUn abrazo y gracias por pasar por mi blog y comentar.
La lectura tiene sus momentos; seguro que es algo pasajero y en nada estás enganchada de nuevo.
EliminarAbrazo!
No conocía este libro pero parece de los que no se saltan, le echaré un vistazo.
ResponderEliminarBesos
Te aseguro que no te arrepentirás.
EliminarAbrazo!
No me atrae especialmente la literatura juvenil, hay mucha mediocridad publicada bajo ese título.
ResponderEliminarUn abrazo
A pesar de estar bajo la etiqueta de literatura juvenil, creo que es de esas lecturas que agradecemos más de mayores que de jóvenes. Dale una oportunidad y me cuentas.
EliminarAbrazo!
Me ha gustado esa imagen del protagonista dando libertad a sus cuentos y soltándolos atados a un farolillo. Me lo anoto ;)
ResponderEliminarGracias y besos
Es una imagen magnifica.
EliminarNo creo que me equivoque al recomendártelo. Cuéntame si lo lees.
Abrazo!
Cómo me encanta encontrarme con sorpresas inesperadas cuando leo a algún autor.
ResponderEliminarQué original el argumento.
Un abrazo!!
Siempre resulta bien eso de dejarse sorprender.
EliminarAbrazo!